miércoles, 14 de octubre de 2009

Mi mamá conoce a Coco Chanel.

¿-Estás llorando?- me decía mientras flotaba, ahí, entre las aguas saladas.
-¿De verdad lo estás haciendo? Esas son lágrimas de reptil- me decía, mientras hacia “la plancha” en mi cuarto, que ya era casi una pelopincho.
-¿Estás pensando? Está mal que lo hagas. Pero que no lo hagas también.- me decía, mientras hacía una mortal y me salpicaba, haciendo burbujas con sus gruñidos, queriendo triunfar, auto coronarse.
-Está mal que no quieras, y que quieras también.- me decía mientras yo, parada hacía equilibrio sobre mi escritorio francés que flotaba.

5 comentarios:

Pop! dijo...

grooooooosooooooooooooooooo
como siempre, no mentira, cada vez mejor...

Volquer dijo...

Hermoso texto Cucú. Queremos más!

Elisa dijo...

bello
me hace acordar a otro escrito, tambien muy bello


felicitaciones, con beso y abrazo

Anónimo dijo...

te estas superando ahijadita mia!

Anónimo dijo...

alicia en el pais de las maravillas